Le diré de mí mismo que soy un hijo de mi tiempo, un hijo de la increencia y de la duda, lo he sido hasta ahora e incluso (lo sé) lo seré hasta que me muera. Cuántas penas me ha costado ya mi sed de fe y cuántas me cuesta todavía. Una fe que se vuelve más fuerte en mi alma cuantos más argumentos contra ella encuentro.

Fiodor Dostoievsky

09 abril, 2010

INCOMUNICACIÓN PULSERIL






Utilicemos un poco la intertextualidad y lleguemos a alguna conclusión sobre una moda nueva que se está imponiendo entre los chavales.


Hace no mucho leía en un excelente blog cómo hay signos inequívocos en ciertas personas que nos dejan imaginar libremente la estupidez que emana en su vida como humano de a pie. Muchas veces esto es tan verdad como que el sol sale todas las mañanicas para dar por culo a los que duermen plácidamente.
Ahora mezclemos a esta clase de señalados por sus objetos (por sus alhajas los conoceréis) con la educación vertida en ellos y nos haremos una idea de toda la razón que lleva otro diseccionador de la realidad cotidiana.


Quiero llegar a parar a algún lado. Ahora resulta que estamos importando la moda de utilizar en garitos las llamadas pulseras sexuales. Son pulseras de diferentes colores de las cuales podemos extraer el gusto que tiene nuestro partenaire ante una posible confrontación de vaho en las nucas. Por lo poco que sé las hay para todos los tipos de posiciones, para besos recatados o para bajarte la ropa interior sin mediar palabra. Es precisamente esto último lo que más pena me da, estamos desechando la verborrea y el lenguaje para conocer y comunicarnos en pos de establecer cierto tipo de relación para pasar a acechar en la discoteca de moda a las tías o tíos que lleven ciertas pulseras. Incluso abandonado el lenguaje nos podríamos valer de otros lenguajes, más atávicos, como el corporal, del que tanto sacan provecho los chulitos de barra con esos interminables cuellos abiertos de hortera postmodernos. 


No quiero banalizar el tema porque me parece que la comunicación básica, en muchos sitios, se está perdiendo pero tampoco pretendo que mis pulseras hablen por mi, no quiero decirle a nadie en un "apriori" si me gusta que me den por detrás mientras me pregunta que cómo me llamo porque con el calentón se le olvidó hasta preguntarme si era gay. No, no lo soy y gracias por preguntar.



18 comentarios:

  1. Esto es bastante triste. Se agradece que lo hayas enfocado con humor, así se alivia el tema.
    Luego comento que lo piense.

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  2. Me has dejado sin palabras, dame una pulsera.

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  3. Hay que ver los jóvenes de hoy en día, yo a su edad estaba jugando con muñecas. Aunque bueno, supongo que las generaciones cambian, desde luego con esta noticia, para peor. Me parece muy fuerte, yo tengo de esas pulseras a montones, hace tiempo que estaban de moda, y yo llevaba el brazo lleno y de todos los colores, desde luego ya no me las pongo más. Como creo que aquí no se pueden poner imágenes os dejo este link en el que pone el significado del color de cada pulsera, es para quedarse helado.

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  4. http://www.noticiasdenavarra.com/2010/04/08/mundo/prohibidas-en-brasil-las-pulseras-del-sexo

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  5. No es plan de ser tampoco un beato, pero ese tipo de modas entrañan muchos riesgos. El sexo no es malo en sí mismo, pero siempre y cuando se haga dentro de una buena práctica. Buscar sexo muy a menudo con personas practicamente desconocidas es desde luego un riesgo, porque entras en una red de personas en la que al menos no todos tienen interrelación social entre si, pero sí están interrelacionadas sexualmente como las ramas de la copa de un árbol. Con lo que ¡Amigos! ya nos movemos en el juego de las probabilidades y sobra con que una persona tenga una enfermedad de transmisión sexual como para que el resto de personas implicadas se contagien o al menos corran un riesgo severo.

    Sabiendo esto, te das cuenta que las pulseras en realidad no es el fondo. Ya que pulseras son un producto de marketing más, pensadas en una oficina por unos tipos adultos, destinadas al consumo de la chavalería ingenua. El fondo es que estos tipos adultos prefieran ganar dinero poniendo en riesgo a chavales con la pulsera y no promoviendo el uso del preservativo. Y eso si es TRISTE además de decir lo mal que va el mundo!

    Perdonadme por extenderme una vez más, pero escribiendo a veces me emociono! jaja!! Saludos foreros!

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  6. Y a mí que las pulseras del amor que me gustan son éstas:

    http://media.photobucket.com/image/esposas/Princesadelastinieblas/espalda_esposas.jpg

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  7. Desclasado: Es que si nos quedamos sin humor dónde vamos a ir a parar.

    Amor: La pulsera la eliges tú y luego ya te vendrán los pretendientes, jeje.

    P: Es que antes no le dábamos el sentido que le otorgan ahora los jovenzuelos, cuestión de connotación.

    Dani: Completamente de acuerdo contigo, el marketing y la mercadotecnia de estos productos no se basa en la moralidad ni nada de esas chorradas, a cuanti más dinero mejor. Luego si hay problemas, pues a echarle la culpa a tól mundo.

    J: A mi también me gustan más esas, dónde va a parar.

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  8. Esto de las pulseras lo lei hace tiempo con verdadero horror, y es lo que comentamos en otro blog también, el sexo sin valores y sin sentimientos, y ahora tambiénn sin palabras, y sin los preambulos y el bonito juego de descubrir al otro.

    Lamentable.

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  9. Seoane: Bienvenida por estos lares. Cuando el amor se desprende de todo eso nos encontramos con el sexo y si encima ya no se necesitan ni palabras ni preliminares nos damos de bruces con el follar, así dicho en plata. Para qué más, pensarán los chavales y para qué menos pienso yo. No se puede caer ya más bajo.

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  10. Todos utilizamos unos determinados códigos cuando decidimos nuestra manera de vestir, de movernos, de mirar...porque pretendemos que los demás nos interpreten de una determinada manera. La pulseras de colores serán un complemento más dentro de ese "lenguaje".
    Los que violaron a la joven, es probable que lo hicieran también aunque no llevara la pulsera. O eso creo yo.

    Un saludo.

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  11. Pues son las primeras noticias que me das, porque yo que soy joven todavía no he visto a nadie utilizando esas pulseras ni tenerlas.

    Un besote ;-)

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  12. Ahí le has dado sensei jeje! luego le echamos las culpas al empedrado. Yo tengo la particular teoría, de que la sociedad occidental en la que vivimos está infantilizada y todas estas cosas vienen de ahí: los adultos se comportan como niños y a la vez se les exige a los niños comportamientos de adulto. Los ejemplos son muchos y variados y darían para que nos fabricases miles de artículos, pero pongamos un ejemplo: se observa que los adultos de cierta edad se horrorizan de generación Ni-Ni. Luego esos adultos la enseñan en TV como especímenes de zoo para consumo adulto y de niños, poniendo a los mismos como modelo de héroe de la televisión. Es como decir quieres éxito, se garrulo, pero por favor ¡no saques malas notas en el colegio!XD.

    Al final la pulsera es igual porque cuando sales cualquier sabado noche y ves el percal, te das cuenta quien es una "guarrilla" y quien es un "chulo", pero la pulsera viene a ser la manera adulta de diferenciarlos ¡sin ella no nos hubieramos dado cuenta! jaja

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  13. ¿Es usted gay?
    Siempre suyo
    Un completo gilipollas

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  14. ¿A quién le preguntas si es gay?

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  15. Los medios de comunicación no sé si son parte de la difusión o qué. Me explico: alguien saca en su pueblo la moda de las pulseritas, algo que pasaría de moda y no saldría de su pueblo, llegan los medios y ¡tachán!: difusión mundial y lo que seguramente se hubiese quedado en gamberrada local se transforma en posible problema.
    Y a mí me parece una chorrada lo de las pulseras, otra Infantilización más que dice Dani: ya ni te preocupes de hablar, de transmitir mensaje; ponte la pulsera del color adecuado y a funcionar. Más fácil que hacer amigos en feisbuc, oiga.

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  16. Es terrorífico, de un vacío tremendo. Me recuerda al código de los pañuelos entre la comunidad gay, pero en su momento, aquello entre adultos no era más que un juego de seducción. En cambio estas pulseritas... ya ves, acaba con chavalas violadas en un descampado.

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  17. Blue: La ropa nos connota y nos define, expone nuestra forma de ser lo que pasa es que la pulseras nos marcan sexualmente en ciertos ambientes, cosa que la ropa no hace, no hay blusas que muestren que nos gusta el sexo oral, por ejemplo. Gracias por comentar, cómo no.

    Brian: Yo tampoco las he visto, espero no verlas, o si, jeje.

    Dani: El éxito televisivo hoy día va muy asociado al garrulismo más extremo, dejémonos de manuales de estilo y mierdas, la clase baja al poder.

    Completamente Gilipollas: No soy gay todavía, ni me lo he planteado pero puede que me vaya peor todavía así que me quedo con mi heterosexualidad.

    Desclasado: Estas modas no sé de donde surgen, lo execrable es que se extiendan con tanta rapidez.

    Insanus: El juego de los pañuelos, como dices, es un juego entre adultos, estas pulseras están más enfocadas a la niñez por lo que nunca esperaría ver a una cuarentona con este tipo de alhajas.

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  18. Creo que es la línea entre el uso de la moda como una vía para hacer que alguien sexual para vender algo. Es una línea borrosa y difícil de controlar.

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Un comentario puede hacer que este pobre mujik tome aire y se decida a escribir de nuevo ante el inusitado clamor popular.